26/04/2019
Donar sangre es un acto de generosidad que todos deberíamos hacer. Ayudaremos así a salvar vidas con un simple gesto que nos llevará muy poco tiempo; además es muy posible que nosotros mismos necesitemos sangre en algún momento de nuestra vida y cuando llegue ese momento agradeceremos más que nunca la ayuda de los donantes. Sin embargo, y aunque la gran mayoría de la población puede ser donante, hay algunas características especiales que lo impiden.
Seguro que has oído hablar de la necesidad de donar sangre. Habitualmente hay unidades especiales móviles distribuidas por las ciudades para que puedas hacerlo fácilmente, y si acudes a un hospital y consultas al personal sanitario, ya sea al auxiliar de enfermería, a la enfermera o al médico, ellos te informarán acerca de dónde, cuándo y si eres apto para donar en el propio hospital. Cumplir los requisitos para donar sangre es muy fácil, y la gran mayoría de nosotros lo hacemos, pero existen algunas circunstancias que lo impiden y que debes tener en cuenta antes de donar sangre:
- Pesas menos de 50 kilos: Si no llegas a pesar 50 kilos no podrás donar sangre por una cuestión de seguridad, ya que la cantidad de sangre que se saca podría afectar a tu salud.
- Estás en ayunas: Es importante que antes de ir a donar sangre hayas hecho alguna comida contundente, para evitar posibles mareos. Aunque estés acostumbrado a hacerte los análisis de sangre en ayunas, recuerda que esto no es un análisis y que se extrae más cantidad de sangre.
- Te has hecho un tatuaje en los últimos 4 meses. Este tiempo se estipula para evitar posibles infecciones.
- Estás embarazada o has dado a luz en los últimos 6 meses, ya que tu cuerpo debe recuperarse tras el embarazo o bien no está preparado durante él.
- Tienes más de 65 años: Aunque ya hayas sido donante previamente, a partir de los 65 años un médico debe autorizar que, por tu estado de salud, puedas seguir siendo donante de sangre.
- Has tomado antibióticos en los últimos 15 días, para evitar posibles contagios a través de la donación.
- Tu tensión está descontrolada: A la hora de donar deberás tener una tensión con valores normales, ya que podrías sufrir desmayos o dolencias más graves
- Tomas insulina: Si eres diabético y te tratas con insulina no podrás donar sangre
- Sufres alguna enfermedad infecciosa que puede contagiarse a través de la sangre, como VIH, hepatitis B o C
- Padeces una enfermedad crónica o algún tipo de trastorno de salud grave.