27/10/2016
Cuando oímos hablar de alguien que consigue su título en FP de emergencias sanitarias, nos suele venir a la mente un tipo de trabajo, principalmente el de conductor de ambulancia. Pero… ¿es esta la única salida laboral que nos ofrece? Por supuesto que no: en un centro de teleasistencia, todos los eslabones de la cadena son necesarios para garantizar la pronta respuesta y el protocolo apropiado para cualquier tipo de emergencia.
En el caso del operador de teleasistencia, se trata de un trabajo que admite un gran número de variantes, y es necesaria flexibilidad y empatía para realizarlas. El proceso de asistencia se inicia con ellos, ya que son los que reciben la llamada. Una vez solicitada la ayuda, se debe poner en marcha una serie de medidas para garantizar que esta sea recibida, ya sea el envío de una ambulancia u otro tipo de asistencia domiciliaria o ante cualquier tipo de urgencia.
Funciones de un operador de teleasistencia
Así, además de avisar al vehículo y estar en constante comunicación con él, son necesarias otras labores. Al haber estudiado un FP de emergencias sanitarias, todos los operadores de teleasistencia están versados en las medidas apropiadas, y pueden indicar a la persona que efectúa la llamada las primeras medidas a seguir, tales como recordar el protocolo PAS o dar indicaciones que garanticen la seguridad de los heridos o afectados hasta que pueda llegar más ayuda.
En ocasiones, esta labor incluye la de dar apoyo psicológico: ante un caso de accidente, catástrofe o rescate, es necesario tranquilizar a la persona que solicite su ayuda, y conseguir que atienda a las preguntas realizadas por el técnico. La información recibida será de gran utilidad para los vehículos de urgencias, y también servirá para indicar algunas medidas a tomar de manera inmediata. Conseguir que los afectados conserven la calma y puedan ser de ayuda a los heridos es también de vital importancia.
Hoy día, el trabajo en un centro de teleasistencia incluye el seguimiento de todo tipo de vehículos, manteniendo la comunicación constante a la espera de nuevas informaciones y detalles, y preparando a los centros receptores de heridos para atender la urgencia. La labor del operador de teleasistencia no es sólo una de las alternativas para aquellos que han conseguido su título en FP de emergencias sanitarias, sino una parte de la cadena necesaria, que inicia el proceso de ayuda ante cualquier tipo de urgencia y que necesita de una preparación y coordinación apropiada.