21/12/2017
Ya está aquí la Navidad, y los niños se ven imbuídos con el espíritu de estas fiestas: guirnaldas, muñecos de nieve, villancicos y postales inundan las casas y las calles. ¡Y los niños también quieren sentirse parte de este jolgorio! Por eso, os proponemos 5 manualidades perfectas para completar su educación infantil y desarrollar sus habilidades psicomotrices!
1. Tarjetas de Navidad
¿A quién no le gusta recibir una tarjeta en Navidad? ¡Y más si está hecha de forma artesanal! Aumenta su autoestima con esta sencilla actividad: solo hará falta cartón, tijeras y todo con lo que queramos decorar la tarjeta: cola, rotuladores, purpurina, témperas, celofán…
Podéis hacer una tarjeta en abanico, un valle sobre el que caiga nieve, una tarjeta con sorpresa en su interior… ¡Deja que el niño expanda su imaginación mientras crea y se divierte! Recuerda ayudarle siempre que haya que recortar o utilizar la cola si son muy pequeños. ¡Ya verás cómo les encanta!
2. Muñecos de nieve-calcetines
Desde siempre, los niños han disfrutado al hacer marionetas con calcetines. Pero, ¿por qué no les damos la vuelta en Navidad y los convertimos en preciosos muñecos de nieve? Para hacerlos necesitaréis calcetines de lana, algodón para el relleno, cordel, fieltro y botones.
Utiliza los botones para los ojos y la nariz y el fieltro como cuerpo. Deja que los niños desarrollen su imaginación creando diferentes muñecos de nieve, ¡y cómo se divierten jugando con algo que ellos mismos han creado!
3. Sonajero navideño
No solo es un regalo perfecto para que den a sus hermanos más pequeños, sino que además les permitirá jugar ellos mismos en el proceso de fabricarlo y después. Para ello, necesitarán un cascabel, celo, fieltro, hilos, tijera, un huevo de plástico (el típico que viene de regalo en los huevos de chocolate) y celo.
Para hacerlo los niños necesitarán ayuda. Lo ideal es que hagan una figura (preferiblemente navideña, como Santa Claus, los Reyes Magos o un muñeco de nieve) al que introduciremos el huevo con el cascabel para que pueda ser utilizado como sonajero. ¡Ayúdales y protégeles a la hora de coser! Que no se olviden de ponerse el dedal.
4. Papá Noel es un rollo
¡De papel, claro! Esta es una manualidad muy sencilla, divertida y navideña. Con un rollo de papel, algo de algodón, fieltro y pinturas podremos transformar nuestros rollos de papel higiénico en Papá Noeles deseosos de alegrar las fiestas. Pide que los niños lo cuelguen en su árbol de Navidad, ayudará a crecer su autoestima y se sentirán parte de las fiestas junto a papá y mamá.
5. Árbol de Navidad de fieltro
Otra manualidad navideña tan sencilla como bonita. Basta con recortar fieltro verde con tijeras de punta redondeada y pintarlo o decorarlo a gusto (utilizando restos de guirnalda o bolitas de papel). Ponle una pajita en el medio, como si fuera una piruleta, ¡y ya verás cómo lo llevan a todos los sitios!
